Li Qiuming es un joven aprendiz en una compañia que realiza mapas digitales. Su trabajo consiste en analizar las calles de una ciudad en continuo cambio, para mantener los mapas actualizados. Un día, a través de su visor, aparece una atractiva joven, pero rápidamente desaparece por una tranquila avenida. Tiene que volver a verla. Cuando comprueba la calle para provocar un encuentro furtivo, le sorprende que esa calle no exista. Es más, no puede registrarla en el sistema. La que nos parece una historia de amor al estilo Zang Yimou, va derivando hacia un sorpresivo thriller. En la encrucijada entre una China antigua y otra ultramoderna, entre el control y los mecanismos del poder, TRAP STREET nos habla de los puntos ciegos, de esos espacios a los que no se nos es permitido llegar. Un gran ejemplo del cine no gubernamental procedente del gigante asiático, es la opera prima de Vivian Qu, una de las productoras de referencia del cine independiente chino (“Night Train” 2007, “Knitting” 2008,“Black Coal, Thin Ice” 2014).
Seleccionada en Venecia, Toronto, BFI London, Rotterdam, Hong Kong, San Francisco, entre otros. Estreno en Cataluña
